Un ONLINE más sostenible. Éste ha sido el proyecto desarrollado por las alumnas del equipo Solstitium de Canigó en el concurso First Lego League de este año, bajo el lema SUPER POWERED. El equipo ha llegado a la fase final, celebrada en Cartagena, y ha traído de vuelta una experiencia inolvidable, que nos han explicado en primera persona.
El pasado 25 de marzo un grupo de alumnas de Canigó participamos con nuestro equipo, Solstitium, en la Final Nacional de la First Lego League en Cartagena (Murcia) ¡Qué experiencia más increíble!
Agnés, Ana, Clara, Claudia, Elia, Gema, Irene, María y Marita, alumnas de 3º y 4º de ESO de Canigó, nos cuentan en primera persona su experiencia en la final de la First Lego League 2023, celebrada este año en la Universidad Politécnica de Cartagena.
Propuesta innovadora para el entorno digital
¿Cómo fue vuestra llegada a la sede de la final FLL?
La jornada empezó muy pronto y fuimos de las primeras en exponer nuestro proyecto de innovación. Cada equipo tenía un stand a su disposición, que decoramos para presentar nuestro proyecto al resto de los equipos y público asistente. Allí todo el que quiera puede acercarse e informarse sobre el equipo y el proyecto que presenta.
Un ONLINE más sostenible ¿en qué consistía vuestro proyecto?
Este año, bajo el título “Super Powered”, el desafío FLL nos invitaba a investigar sobre la procedencia de la energía, cómo ésta es distribuida, almacenada y utilizada. El objetivo era realizar y desarrollar un proyecto donde la innovación nos descubriera un mejor futuro para la energía.
En nuestro caso, nuestro proyecto trata de obtener “un online más sostenible” diseñando un Data Center carbón neutro, abastecido por energías renovables, principalmente biogás, a kilómetro cero.
Tuvimos un feedback muy positivo por parte de los jueces. Estaban muy contentos con nuestro trabajo, destacaron la presentación atractiva y la viabilidad del proyecto, así como el hecho de haber compartido el proyecto con distintos profesionales que nos ayudaron a mejorar la solución presentada. Les llamó la atención la presencia de los Valores First entre nosotras, especialmente la cohesión y el teamwork.
La siguiente parte de la final era el juego del robot. Se jugaban tres rondas, de las que solo contaba la de mayor puntuación. Con las expectativas altas, por las buenas puntuaciones obtenidas gracias a las horas de trabajo realizadas, disfrutamos de cada una de las partidas del juego del robot. Aprendimos de los errores e intentamos corregirlos en el PIT de entrenamiento. Fue una jornada muy intensa, los nervios y las emociones nos acompañaron todo el día.
¿Qué es lo que más os ha gustado de la experiencia de participar en un torneo como éste?
Lo que queremos destacar por encima de todo es el ambiente. En total éramos casi 40 equipos, y todo el mundo -los equipos, la organización, sus voluntarios, los jueces y árbitros- era muy amable, servicial y comunicativo.
Lo pasamos muy bien y, sin duda, nos encantaría repetir esta jornada, ya que aprendimos mucho en todos los aspectos. Nos impresionó el nivel de otros equipos de los que también aprendimos, y sobre todo, ganamos una gran amistad entre nosotras.
¡Nos vemos en el próximo reto!
