El 10 de marzo tuvo lugar SCRATCH DAY en Vilavella para acercar a las familias nuestros proyectos de innovación tecnológica.
Jornada de programación en Vilavella
El SCRATCH DAY tiene como propósito que los padres disfruten de una clase de programación junto a sus hijas. Ellas serán las que ejerzan de profesoras enseñándoles cómo desarrollar un proyecto empleando el lenguaje de programación visual: SCRATCH.
El Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) desarrolló este software para promover el aprendizaje del lenguaje computacional en edad escolar. Nuestras alumnas desarrollan competencias como el pensamiento creativo y el razonamiento sistemático, esenciales para vivir en el entorno actual.
Sobre nuestro proyecto de programación
Cada semana las alumnas dedican una parte de su horario a aprender sobre programación con la ayuda de la aplicación SCRATCH. En los primeros cursos de Primaria las alumnas desarrollan proyectos sencillos, aprendiendo el nuevo lenguaje a través de la experimentación. Conforme avanzan en edad y experiencia, el nivel aumenta y diseñan programas (como un Traductor) o juegos. Este aprendizaje basado en el learning by doing – learning by playing consolida conocimientos a través de un aprendizaje significativo.
Este proyecto es una excelente oportunidad para que las alumnas asienten conocimientos básicos de programación de forma lúdica y experimental. De esta manera, favorecemos que surja en nuestras alumnas el deseo por las vocaciones STEAM.
Una experiencia de lo más innovadora
En esta primera edición de SCRATCH DAY participaron las alumnas de 4º y 5º de Primaria. La jornada comenzó con el recibimiento de las alumnas en el salón de actos, que se convirtió por unas horas en un centro de programación. Las alumnas de 4º enseñaron a sus padres cómo programar con Scratch diferentes juegos. Mientras tanto, los padres de las alumnas de 5º aprendieron a construir un robot con Lego WeDo y a programarlo.
Fue una jornada en la que, tanto padres como alumnas, mostraron mucho interés y en talento. Se palpaba la emoción de ambos al realizar las programaciones, crear proyectos y comprobar el funcionamiento en directo. El resultado fue un evento lleno de padres impresionados al ver de qué son capaces sus hijas. Por su parte, las alumnas estaban muy ilusionadas por enseñarles su día a día y todo lo aprendido.