El 25 de septiembre, la clase de 2º de la ESO del colegio Bilingüe Aldovea, empezaba su andadura en el Camino de Santiago. Tenían por delante cinco días para recorrer los 117 kilómetros entre Sarriá-Portomarín hasta el Monte do Gozo, en Santiago.
Aldovea, en el Camino de Santiago 2023
La madrugada del lunes, varios alumnos cerraron la puerta de su casa con una mochila a sus espaldas. Todo era pura emoción por vivir esta hazaña. Afán de superación, interés por aprender, amistad, respeto, empatía… El Camino de Santiago era su próximo reto.
¿El objetivo? Mucho más que un simple viaje. Una aventura hacia el aprendizaje, el compañerismo y la solidaridad, que ha dejado una huella imborrable en nuestros jóvenes aventureros.
El Camino de Santiago ha sido una experiencia súper enriquecedora para todos. Así lo describen ellos:
Valores en el Camino de Santiago de Aldovea
En el Camino, las amistades se fortalecen. Los compañeros de clase se convirtieron en compañeros de viaje, apoyándose mutuamente en cada paso. La ruta jacobea es exactamente eso, compañerismo, echar una mano cuando los demás lo necesitan; curiosidad por aprender, de cada etapa y de la gente que te acompaña; ilusión y afán de superación… Todos aprendieron la importancia de escuchar y empatizar con los demás.
Por otro lado, los estudiantes tuvieron la oportunidad de conectar con el entorno natural. El Camino de Santiago está lleno de historia y cultura. Cada uno de ellos tuvo la oportunidad de aprender sobre las tradiciones locales, la arquitectura histórica y la rica herencia del Camino.
Más allá de los kilómetros recorridos, fue un viaje hacia el crecimiento personal, la amistad, la empatía y la comprensión del mundo que los rodea. En el colegio de Fomento Aldovea trabajamos cada día para ayudar a los alumnos a desarrollar sus capacidades y aptitudes para llegar a ser lo que quieran ser. Estamos increíblemente orgullosos de nuestros jóvenes peregrinos y emocionados por las lecciones que llevarán consigo mientras continúan su viaje educativo.